viernes, 18 de septiembre de 2009

El Ártico será algo del pasado

0 comentarios
Con «sólo» un aumento en la temperatura de un grado centígrado en los últimos 150 años, los cambios en el Ártico han sido dramáticos, según una nueva investigación _ Tras la desaparición del hielo y la nieve aparece una cadena de efectos incalculables

El Ártico será algo del pasado
El zorro ártico se está viendo desplazado de sus territorios por la llegada desde zonas más templadas del zorro rojo.

Nada ni nadie se salvan de los efectos que el calentamiento está teniendo en el Ártico. Según un estudio que publica «Science», el aumento de las temperaturas en los últimos 150 años ha tenido un enorme impacto y, de mantenerse, esta región del planeta está condenada a desaparecer.
«El Ártico tal y como lo conocemos podría ser pronto una cosa del pasado», afirma Eric Post, profesor de Biología en la Universidad Estatal de Pensilvania, quien ha dirigido un equipo internacional para conocer la respuesta biológica al calentamiento en esta región del planeta.
Las especies responden
El equipo de científicos ha documentado un amplio espectro de respuestas en plantas, animales, insectos y humanos a este calentamiento, que ha ido incrementando año tras año la temperatura media en superficie, con efectos dramáticos. Por ejemplo, entre los últimos 20 o 30 años la capa estacional de hielo marino ha menguado 45.000 kilómetros cuadrados por año. La capa de nieve en tierra también se ha reducido, al tiempo que se derrite antes de lo que era habitual. Por tanto, «las especies terrestres y marinas están sufriendo las consecuencias adversas del comportamiento humano a latitudes que están a miles de kilómetros», advierte Post.
Muchas especies icónicas del Ártico que dependen de la estabilidad y persistencia del hielo marino ya lo están pasando realmente mal, como el oso polar, la gaviota marfil, la morsa del Pacífico, la foca anillada, la foca de casco o el rarísimo narval. «Da igual donde uno mire, en tierra, en el aire o en el agua, estamos viendo señales de un cambio muy rápido», asegura Eric Post.
Los investigadores indican que los osos polares y las focas anilladas -ambas especies tienen a sus crías en guaridas o cuevas bajo la nieve- están perdiendo a muchos de sus retoños cuando éstas se derrumban debido al adelanto de las lluvias en primavera. Estas especies podrían estar condenadas a la extinción.
Pero la investigación también revela que especies antes confinadas a zonas más templadas están ahora desplazándose hacia el norte. Los «invasores» más visibles son el zorro rojo, que está desplazando al zorro ártico de sus territorios. Pero hay otros intrusos más pequeños, como la polilla invernal, que arrasa con grandes extensiones de abedules, o los arbustos, cuya presencia afecta cuando la tundra actúa como sumidero de carbono.
Estos efectos se han producido en sólo 150 años y con un aumento de un grado en la temperatura. Será más difícil predecir qué pasará si se produce el aumento de 6 grados previsto por los científicos para finales de siglo.

0 comentarios: