
El gran rescate de los 33 mineros atrapados por durante 69 días a 700 metros, ha dejado en Chile una sensación de felicidad y de unión.
Uno de los detalles más notables y destacados por la prensa mundial ha sido la fe en Dios que han mostrado la mayoría de los mineros. Todos coinciden en señalar que eso los mantuvo sanos y salvos durante los setenta días que permanecieron en las entrañas de la tierra.
Cada uno de los rescatados emergen de la cápsula denominada “Fénix” con una camisa que en el frente dice “Gracias Señor”. En la parte trasera de la camisa se lee “De Él serán la gloria y la honra”, así como la cita del Salmo 95: 4, “Porque en Su mano están las profundidades de la tierra, Y las alturas de los montes son suyas”.
Las camisas fueron donadas por el hermano del minero José Henríquez, quien es cristiano evangélico y ha sido una especie de guía espiritual para los demás. La idea de las camisas surgió después que el hermano de Henríquez, también creyente, escuchó una prédica de su pastor relacionada con el pasaje del Salmo 95.
Su mismo pastor se mostró sorprendido, al ver como la gran mayoría de los mineros salía portando esta camiseta, y aún los mismos periodistas no se lo podían explicar; ya que hace algunos días atrás el club de fútbol español Real Madrid, les envió a cada uno de ellos una camiseta autografiada por todos los jugadores y su director técnico.
Mario Sepúlveda, el segundo en ser rescatado y quien se ganó la admiración del mundo por su buen humor a la hora de salir de la mina, fue el primero en hablar ante la prensa. “Dios y el diablo me pelearon y ganó Dios”, fueron unas de las primeras palabras de Sepúlveda. “Siempre supe que me iban a sacar, siempre tuve fe en los profesionales que hay en Chile y en el Gran Creador”, agregó.
El cuarto minero en salir de las profundidades de la tierra fue el boliviano Carlos Mamani quien recién salido de la cápsula de rescate se arrodilló y señaló al cielo dando gracias a Dios. Un gesto similar tuvo Omar Reygadas, electricista de 56 años. Este salió de la cápsula con la Biblia en sus manos y también se arrodilló para dar gracias a Dios. Reygadas escribió en su casco las palabras “Dios Vive”.
Muchos dicen que los mineros son hombres rudos y muy duros, pero lo que vimos hoy fue un acto de humildad y de reconocimiento hacia nuestro gran Dios, de aquellas personas que no perdieron la fe y el ánimo.
Damos gracias a Dios por este gran acontecimiento que ha ocurrido en nuestro país, ya que sabemos que este rescate fue un éxito, fue solamente por su misericordia y gran amor para con las almas.














"Pedid por la paz de Jerusalém;
Sean prosperados los que te aman.
Sea la paz dentro de tus muros,
Y el descanso dentro de tus palacios.
Por amor de mis hermanos y mis compañeros
Diré yo: La paz sea contigo.
Por amor a la casa del Señor nuestro Dios
Buscaré tu bien."



Cuando Jesús murió en esa cruz, fue alli donde nosotros nacimos.
Debemos tomar conocimiento acerca de ese gran sacrificio que el Hijo del Hombre ha hecho por cada uno de nosotros, tantos tormentos, castigos...solo por nosotros, por el gran amor que El nos tiene.
Jesús siendo Dios podía decir basta a esto, no lo quiero, y sin embargo obedeció al Padre para que se cumpliera el Sacrificio del Cordero; solo asi con su SANTA SANGRE pudieron lavarse nuestros pecado y asi fueron abiertos los Cielos para poder estar en los lugares Santos junto a El....pues cada uno de nosotros tenemos un lugar alli, junto a El y al Padre.
Como no darle gracias por tanto amor!!! El te pensó y te amó antes de la creación, dice la Palabra; ya te tenía pensado desde antes de la creación.
Que maravilloso es este Dios Vivo que tenemos.... Debemos agradecerle siempre a Jesús, con obediencia, en humillación, reconociendo que de El es toda la Gloria, es todo el Honor , toda la Honra...solo para El; que no quede en vano tanto dolor, castigos, humillación, tanta Sangre derramada solo por ti; piensa cada minuto de cada día, todo lo que Jesús pasó lo hizo por ti. Deja que solo una gota de su Sangre te toque hoy....





0 comentarios:
Publicar un comentario