miércoles, 8 de julio de 2009

Mortal brote de violencia étnica en China

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  • Al menos 140 personas murieron y otras 828 resultaron heridas
  • Las protestas se produjeron la víspera y participaron entre mil y tres mil personas

El Financiero en línea

Pekín, Al menos 140 personas murieron y otras 828 resultaron heridas en el brote de violencia étnica registrado la víspera en Urumqi, capital de la provincia de Xingjiang, y donde se encuentra la mayoría de musulmanes chinos, informaron medios locales.

Las protestas se produjeron la víspera y participaron entre mil y tres mil personas según las fuentes.

Cientos de personas fueron detenidas por la policía, según la agencia china de noticias Xinhua, que informó del arresto de "más de 10 personalidades que instigaron la revuelta del domingo".

"La policía busca a otras 90 personas importantes", agregó la agencia de noticias.

La televisión estatal china CCTV difundió imágenes en las que se ven civiles ensangrentados, protestantes que lanzaban piedras a la policía y vehículos en llamas.

La ciudad ya recobró la calma, según la prensa china, aunque algunos barrios de la capital provincial están tomados por las fuerzas de seguridad.

Pekín culpó de los incidentes a la disidencia uigur en el exilio, en particular a la presidenta del Congreso Mundial, Rebiya
Kadeer, que ya pasó seis años en una cárcel china por sus demandas a favor de la autonomía de la región.

Según el gobierno chino la organización habría instigado a la violencia en llamados a través de Internet.

Sin embargo, la Asociación Americana Uigur (UAA), un grupo político exiliado en Estados Unidos, aseguró que según sus fuentes locales la policía china disparó contra los manifestantes pacíficos.

UAA señaló que la manifestación tenía el objetivo de protestar por la respuesta de las autoridades chinas contra dos obreros de etnia uigur que trabajaban en una fábrica de juguetes de Cantón (sur) y que fueron linchados después de ser acusados falsamente de violar a dos mujeres.

El ataque dejó dos muertos y 118 heridos, y los manifestantes de Urumqi salieron a la calle para expresar su rechazo por lo sucedido, según UAA.

Estos incidentes recuerdan lo ocurrido hace apenas un año, el 14 de marzo de 2008, en Lhasa, la capital del Tíbet, otra región conflictiva por las diferencias entre tibetanos y Han (etnia mayoritaria de China).

En la revuelta de Lhasa al menos 18 civiles y un policía murieron, según cifras oficiales, aunque el gobierno tibetano en el exilio cifra en cientos las víctimas de la represión china.

Xingjiang, situado en la frontera con Asia Central, es una de las regiones más pobres de China y cuenta con 8.3 millones de uigures, la minoría musulmana que cuenta con una cultura y una lengua propia derivada del turcomano.

También conocido como el Turkestán Oriental por los grupos que piden su independencia, la región fue invadida en 1949 por las tropas comunistas y desde entonces las organizaciones de derechos humanos denuncian un deterioro de la situación política y la cultura propia. (Con información de Notimex/APB)

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